En realidad, las auditorías no se realizan para atestiguar que los vertidos de aguas residuales contengan menos de X miligramos de bacterias por litro o que las emisiones de gas que producen se encuentren por debajo de ciertos valores. Así la auditoria en el Sistema de Gestión Ambiental se refiere al cumplimiento de los requisitos de la norma y conlleva la comprobación de que se encuentran todos los componentes necesarios para tener un sistema activo y que funcione correctamente.
La norma ISO 14001 permite instaurar un Sistema de Gestión Ambiental. La certificación es sobre el propio Sistema de Gestión Ambiental y no sobre la acción ambiental de la empresa. La empresa puede tener un Sistema de Gestión Ambiental completo y perfectamente funcional como establece la norma ISO14001 sin tener el certificado. La empresa valorará la certificación, en función de si le beneficia económicamente implantar la norma y realizar el proceso de certificación.
La certificación no tiene por qué ser beneficiosa para todas las empresas, especialmente para pequeñas y medianas empresas, asimismo no siempre es necesaria pues quizá esa empresa únicamente cuente con tres clientes en su cartera que estén preocupados con el medio ambiente y entonces con un Sistema de Gestión Ambiental implementado es suficiente.
En conclusión, independientemente de la decisión adoptada, las empresas tienen que considerar que la certificación en ISO-14001 no las convierte en unas organizaciones respetuosas con el medio ambiente ni garantiza que mejorarán seguidamente su desempeño con respecto al medio ambiente. Una vez conseguida la certificación hay que trabajar mucho para conseguir los resultados deseados. Algunas empresas deciden no certificar su Sistema de Gestión Ambiental de inmediato, aunque son muchas la que sí que lo deciden y las razones pueden ser:
- Encontrase certificado implica encontrase evaluado y aceptado por terceras personas externas a la empresas, profesionales y acreditados para ello.
- Estar certificado puede significar mayor compromiso respecto al medio ambiente.
- El certificado ayuda a abrir puertas en el mercado internacional y con la Administración Pública.
- El certificado contribuye a la eliminación de las auditorías en cumplimiento con la legislación.
- El sello del certificado es la simbolización de que la empresa respeta el cuidado y por el medio ambiente.
- Con el certificado se consigue la mejora continua del Sistema de Gestión Ambiental, ya que se lleva a cabo un mantenimiento continuo.
El proceso de certificación de ISO 14001
Cuando el Sistema de Gestión Ambiental cumple con los requisitos establecidos por la norma ISO14001 o se está muy próximo al cumplimiento, se pueden seguir los siguientes pasos:
- Auto declaración de que el Sistema de Gestión Ambiental plasma los requisitos de la norma: lo que significa que la empresa audita su propio Sistema de Gestión Ambiental, tomando como base las especificaciones de la norma ISO-14001.
- Pedir que se reconozca el Sistema de Gestión Ambiental por una consultora que garantice que la empresa cumple los requisitos de la norma ISO 14001: esto supone que una consultora como Aleis Sistemas declare que el Sistema de Gestión Ambiental cumple todos los requisitos que exige la norma ISO 14001. Ponemos un ejemplo práctica, una Organización A deja que la Organización B audito sus Sistema de Gestión Ambiental para satisfacer las exigencias de que la Organización A obtenga el SGA. El reconocimiento por parte de segundas personas aumenta el valor cuando un cliente quiere que su organización cuente con el SGA, pero sabe que no es necesario obtener un certificado oficial.
- Solicitar la certificación a terceras personas, es decir, a un organismo independiente de certificación: la certificación por parte de terceras personas significa que la empresa se enfrenta a ser auditada por su Sistema de Gestión Ambiental y declarar oficialmente que cumple todos los requisitos de la norma ISO-14001.
Si aún tienes dudas de lo que más te conviene, ¡no dudes en poner en contacto con nosotros!